En el mundo del branding, dos términos suelen generar cierta confusión: BrandBook y Manual de Marca. Aunque ambos están relacionados con la identidad de una marca, cumplen funciones y tienen características distintas.
Manual de Marca: La Guía Práctica
Imagina el Manual de Marca como un recetario de cocina para tu marca. Es un documento técnico que contiene las reglas y pautas específicas para el uso correcto de todos los elementos de la marca.
- Contenido: Define con precisión el logotipo, la paleta de colores, las tipografías, el tono de voz, y todas las aplicaciones posibles de la marca (desde papelería hasta publicidad digital).
- Objetivo: Asegurar la coherencia visual y verbal de la marca en todas sus comunicaciones.
- Lenguaje: Técnico y preciso, enfocado en la aplicación práctica de las normas.
- Público: Diseñadores, equipos de marketing y cualquier persona involucrada en la creación de materiales de la marca.
BrandBook: El Alma de la Marca
Si el Manual de Marca es el recetario, el BrandBook es la novela de tu marca. Es una pieza creativa que cuenta la historia de la marca, su personalidad y sus valores.
- Contenido: Presenta la esencia de la marca a través de imágenes, historias, y un lenguaje inspirador.
- Objetivo: Transmitir la emoción y la identidad de la marca de una manera más subjetiva y creativa.
- Lenguaje: Emocional y narrativo, enfocado en conectar con el público a un nivel más profundo.
- Público: Empleados, clientes, inversores y cualquier persona interesada en conocer la marca más allá de su aspecto visual.
¿Cuándo necesito ambos?
Idealmente, una marca debería tener tanto un Manual de Marca como un BrandBook. El Manual garantiza la consistencia en todas las comunicaciones, mientras que el BrandBook inspira y emociona.
En conclusión, el Manual de Marca es la herramienta para construir la marca, mientras que el BrandBook es la ventana al alma de la marca. Ambos son esenciales para crear una identidad de marca sólida y memorable.